Adiós, gatito pardo

A los gatitos pardos que abandonan tigres perdidos


Gimme gimme gimme your precious love for me to hold*

El gato saltó de la barda y se fue.
Encontró una casa adecuada.

Atrás quedó su vida oscura y callejera,
sus noches de compañía pagada,
de relajantes musculares.

Olvidó el número donde compartía
su existencia de cenizas e incendios.

Gato rehabilitado.
Con crédito hipotecario,
que compra mandado.

Pinche gato tan gato.
Me dejaste sola en el callejón
de los gatos perdidos,
parada en la barda de vidrios quebrados.
Llevo ocho vidas quemadas.

Sigo pérdida,
mas he de confesarte:
siempre fui un tigre
a veces de circo,
otras, uno perdido.
Caminando esta maldita ciudad que hierve.
Sigilosa,
para que no se note que no pertenezco,
mientras en el asfalto
pinto flores y aves.

Voy a volver selva todo el rumbo.
Soy un tigre furtivo
con pluma y pincel,
que no pertenece,
que — perdido —
está creando su propio mundo.

Gatito pardo.
Tú estás borrado.



*Grinderman, "Palaces of Montezuma"

Comentarios

Entradas populares